El pasado domingo la APKU 2000 organizó una carrera especial sumando un importante parque de 32 karts donde los pilotos de la asociación compartieron pista con sus invitados. Grandes pilotos, mucha experiencia y aún más anécdotas hicieron una jornada increíble.
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| I. PAVLOV - E. PAVLOV (FOTO: YAGAN RACING) |
Ya finalizados los torneos anuales de las entidades relacionadas a esta actividad, la Asociación Pro Karting Ushuaia 2000 tiró la idea de hacer una carrera donde los pilotos en actividad pudieran invitar a esos otros que ya no lo están. Rápidamente Lucas Yerobi se puso a trabajar a fondo y en sólo tres días tenía gran parte de la competencia solucionada. Sumado a eso, empezó a cursar invitaciones a todos esos que forjaron la APKU en aquellas épocas de la carrera en el semi permanente del Paseo de las Rosas, el playón de La Anónima, el San Salvador o el inolvidable callejero de la Rotonda del Indio. También se invitó a la gente de Río Grande que sin dudar dio el presente.
Finalmente llegaba la hora de las inscripciones y para asombro de todos, la planilla se conformaba con 28 duplas en la Zanella–Sudam y otras 7 en la Stihl. Posteriormente se caían dos y el número en el segmento mayor cerraba en 26 y uno menos en la categoría escuela cerrando en seis. Un número inusitado ya que desde hace muchísimo tiempo no habría un parque tan grande y eso conllevaría plantear otro sistema de carrera ya que superaba ampliamente lo esperado.
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| HNOS PAVLOV (FOTO: GRACHU LUDUEÑA) |
Finalmente se reacomodó el Reglamento Particular de la Prueba dejando como modo de carrera que cada piloto tendría su clasificación, serie y final, y de ningún modo podrán mezclarse titulares con invitados. La clasificación del piloto titular sumada con la clasificación del piloto invitado darían la grilla de partida para la primer serie, que la correría el piloto titular. Como finalizaran la primer serie los 8 primeros invertirían sus grillas y los demás largarían como finalizaron la primera serie, largando la 2ª serie los pilotos invitados. La primer final la largaría el piloto titular siendo el orden de partida la sumatoria de tiempo de las dos series, y la segunda final la largaría el piloto invitado siendo el orden de partida como halla finalizado el piloto titular en la primera final. La suma de las dos finales daría el resultado del Gran Premio.
Las acciones comenzaban en la tarde del sábado, en el kartódromo capitalino, donde todos pudieron salir a pista en pruebas libres. Allí aparecían esos cotidianos rostros que en algún momento fueron los pilotos oficiales: Walter Schreiner, Jorge “Pitufo” Palavecino, Oscar Digenaro, “Chori” Zentner, Pablo Onyszczuk o Rubén Varas, más un Norberto Pavlov que no perdió la oportunidad de hacer de Pace Car con uno de los históricos Yamahita con cambios. También algunos más relacionados con el automovilismo actual como Marcelo Garro, Julio Sarmiento, Mauro Bianco, Adrián Fernandino y Nicolás Jara. Otro que se sumó a la movida fue Lucas Lenti que tuvo sus inicios en la Sthil y hoy está volcado al futsal. No faltaron los riograndense; Matías Saldivia que hacía tres años que no se subía a un karting o Mariano Techera desempeñándose en el automovilísmo pista, que también aprovechó para darse unas vueltas.
Al rededor de las 18 se callaban los motores y se escuchaban los comentarios y opiniones de los que estuvieron en pista. Casi todos los invitados coincidieron en “esto está bárbaro, hace mucho que no me subía a un karting y la verdad que está muy bueno, eso si, después de 3 o 4 vueltas no me quedan más brazos” y fue esa la opinión generalizada.
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| IMPRESIONANTE EL ANDAR DE NACHO PAVLOV EL FIN DE SEMANA (FOTO: GRACHU LUDUEÑA) |
La actividad continuó el domingo por la mañana para que en horas del mediodía se pongan en marcha las las tandas clasificatorias. La Stihl no tuvo ningún problema, pero la Zanella al ser tantos los organizadores decidió dividirla en dos para que no se molesten en pista y puedan lograr su mejor tiempo. Esto se hizo tanto para los titulares como para los invitados.
El espectáculo fue increíble, el trazado ushuaiense no tiene registro de haber albergado tal cantidad de unidades en competencia. Fue imposible tratar de ver todo ya que los 800 metros que tiene de asfalto estaban cubiertos de Karts y cada uno con su particular pelea por algún puesto. Un recuerdo difícil de borrar de la retina de los que fueron a verla. Los boxes estaban llenos, prácticamente no había lugar para más, era un mundo de pilotos, mecánicos, asistentes a lo que se sumó en gran forma el público que rodeó el circuito y se quedó hasta la última vuelta.
En lo que respecta a lo competitivo en sí, y aunque son casi anecdóticos los resultados, la Stihl quedaba en manos de la dupla Camila Hernández – Facundo Digenaro, segundos quedaban Arian Yerobi – Ezequiel Villareal y completó el podio Thiago Yerobi – Santiago Ortega.
Para la Zanella, Nicolás Loiza–Lucas Garro se quedaban con el 1, tras ellos quedaron los hermanos Emilio y “Nacho” Pavlov, y en tercer lugar Lucas Yerobi – Javier Muniello.
Un domingo con pura sangre kartista que sin dudas dejó buenísmos recuerdos y un pensamiento generalizado: “Que se repita”.
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